lunes, 4 de noviembre de 2013

Trescientos ocho.


Supongo que esto ha sido todo. Tú marcaste un antes y un después en mi vida, de eso puedes estar seguro. Fuiste la razón de que todos los días me despertara con una sonrisa, la razón de que bajara corriendo las escaleras para verte medio segundo, la razón de que no me importara hacer el ridículo sin importar lo que me dijeran. Fuiste tú. Y siempre ocuparás un lugar especial dentro de mi.

La chica de los gatos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario