domingo, 27 de enero de 2013

Veintitrés.


Sé que no soy perfecta. No soy la clase de niña perfecta que sigue las normas al pie de la letra. Cometo los errores que nunca hayas visto, tropiezo tres veces si es necesario con la misma piedra porque lo necesito, o tal vez no, pero me levanto con dos cojones. Casi siempre consigo lo que me propongo, y si no lo consigo, tranquilo que ya lo conseguiré. Si estás pensando lo que yo creo... no, no te mostraré tan fácilmente mis penas y jamás lograrás verme llorar, jamás. Porque como en esta cabecita se meta algo, difícil será que lo consigas sacar...
Soy indecisa, atrevida, arriesgada y demasiado dura por fuera, pero por dentro ni te imaginas lo que guardo. Soy como un libro cerrado que no hay más que mirar la portada para saber de qué trata. Soy... puff... ¿cómo decírtelo? Soy la soñadora de tu mente, la más idiota, a la que no le importa esperar por tus besos, soy... Soy la persona que más te quiere y te querrá en este mundo, ¿lo entiendes? Sé que es difícil de creer, el típico tópico de amor, pero no. No es así, te lo digo porque lo siento, y ¿sabes? siempre que lo siento, te lo digo, siempre.

La chica de los gatos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario